El área de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Zaragoza culminará la próxima semana el proceso de adaptación de los grandes marcos metálicos de la Pasarela del Voluntariado, una estructura que sostiene los 450 cristales del puente. La inversión en esta obra ha superado los 120.000 euros y se ha realizado en dos etapas: la primera consistió en el reemplazo de medio centenar de grandes cristales dañados, mientras que la segunda se enfocó en corregir la corrosión que afectaba a la estructura metálica que los sostiene.

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El área de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Zaragoza completará la próxima semana la adaptación de los marcos metálicos de la Pasarela del Voluntariado, una estructura que soporta los 450 cristales que conforman el puente.

La obra ha supuesto una inversión de más de 120.000 euros y se ha llevado a cabo en dos fases: la primera permitió sustituir alrededor de cincuenta cristales, los cuales se encontraban en peor estado, mientras que la segunda corrigió el problema de corrosión que afectaba a la estructura metálica de soporte.

Para ello, se han acondicionado todos los perfiles, lijándolos y pintándolos.

En algunas áreas, debido al intenso deterioro ocasionado por la oxidación, fue necesario reemplazar elementos completos de los marcos.

El consejero de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, mencionó que 'esta obra ha servido como prueba para evaluar nuevos materiales que sean más resistentes a la corrosión.

Hemos instalado un módulo metálico de acero inoxidable que nos ayudará a definir cómo debe ser la rehabilitación integral de la pasarela, proyecto que llevaremos a cabo dentro de un plan de mantenimiento de puentes más amplio'. La pasarela requiere una intervención completa que solucione de forma definitiva los problemas de corrosión, que no solo afectan a las barandillas, sino también a otros elementos y al pavimento.

No obstante, el puente no presenta problemas estructurales, pero se busca evitar que los deterioros se agraven y afecten su estabilidad.

Serrano señaló que 'en este momento, los profesionales municipales están finalizando los pliegos para licitar la redacción del proyecto, en los cuales se especificarán las soluciones más adecuadas.

La inversión necesaria puede variar significativamente según si se reemplazan todas las estructuras metálicas y el tipo de material y tratamiento que se aplique, pero será una inversión considerable'. En cuanto a los cincuenta cristales reemplazados, varios de ellos habían sido vandalizados y habían caído al río, representando un riesgo para la seguridad.

Otros muchos se habían roto debido a los problemas de los marcos metálicos y al movimiento de la pasarela.

Hasta ahora, se han sustituido cerca de 200 vidrios desde la primera intervención realizada en 2010.

'La adecuación de la Pasarela del Voluntariado forma parte de los trabajos de mejora que el Ayuntamiento de Zaragoza está llevando a cabo en los últimos meses en varias estructuras de la ciudad', afirmó el consejero de Urbanismo e Infraestructuras.

Entre las intervenciones realizadas, destacan la rotonda de Puerto Venecia en la Z40, el puente de Cesáreo Alierta bajo el Camino Las Torres y el viaducto de la avenida Ciudad de Soria cerca de la estación de Delicias.

'Recientemente, también hemos rehabilitado el puente que cruza el Paseo Rosales y la calle Uncastillo, finalizándolo hace pocas semanas y completando así la renovación de los cuatro puentes de acceso al Parque Miraflores'. Con una inversión total de 350.000 euros, estas actuaciones se han llevado a cabo progresivamente para solucionar problemas de filtraciones y eliminar vegetación que generaba áreas oscuras e inseguridad durante la noche.

Para ello, se ha impermeabilizado la estructura y el pavimento, renovado barandillas corroídas y suprimido zonas sombrías creadas por la vegetación, que dificultaban la visibilidad lateral.

La rehabilitación más reciente ha sido la de la pasarela que cruza el río Huerva en la calle Marina Española, la cual comenzó hace pocos días con una inversión de 50.000 euros.

Se trata de una estructura metálica afectada también por la oxidación.

En este momento, los trabajos se centran en la reconstrucción de los nódulos que se apoyan en el estribo de la margen izquierda, junto a la calle Manuel Lasala.

Durante el mes de agosto, la obra se trasladará al centro de la pasarela para eliminar la pintura deteriorada y la suciedad, y aplicar un nuevo tratamiento.