Cuatro espadas romanas de la era romana, sus empuñaduras y vainas de madera y cuero, y sus hojas de acero, exquisitamente conservadas tras 1900 años, han aparecido en una cueva desértica cerca del Mar Muerto, informó la Autoridad de Antigüedades de Israel.
En un emocionante descubrimiento, arqueólogos israelíes han encontrado cuatro espadas romanas y la punta de una jabalina en una cueva cerca del Mar Muerto.
La Autoridad de Antigüedades de Israel ha informado que estos sorprendentes hallazgos datan de la era romana, aproximadamente hace 1900 años, y ofrecen un vistazo a la historia del imperio y la rebelión.
Estas excepcionales piezas de artefactos han sido encontradas en una excavación que tuvo lugar hace dos meses en las inmediaciones del Mar Muerto.
Los investigadores, que acaban de publicar sus hallazgos preliminares en un libro recién lanzado, sugieren que estos objetos fueron escondidos en la cueva remota por rebeldes judíos durante un levantamiento contra el Imperio Romano en los años 130.
La antigüedad de las espadas fue determinada por su tipología y aún no se han sometido a pruebas de radiocarbono.
El descubrimiento forma parte de la Judean Desert Survey llevada a cabo por la autoridad de antigüedades de Israel, cuyo objetivo es documentar y excavar cuevas cerca del Mar Muerto y proteger pergaminos y otros objetos de valor antes de que los saqueadores tengan la oportunidad de robarlos.
El clima fresco, árido y estable de las cuevas del desierto ha permitido una conservación excepcional de restos orgánicos, incluyendo cientos de fragmentos de pergamino conocidos como los Rollos del Mar Muerto.
Estos textos judíos, descubiertos el siglo pasado y datados en los primeros siglos antes y después de Cristo, contienen las versiones más antiguas conocidas de la Biblia hebrea, así como una variedad de escritos esotéricos.
Los arqueólogos aseguran que los artefactos excepcionalmente preservados datan del siglo II, cuando los rebeldes judíos lanzaron un levantamiento contra el Imperio Romano.
En su regreso a la cueva, los arqueólogos documentaron una inscripción que habían encontrado décadas antes.
Estos hallazgos revelan una historia fascinante de valentía y resistencia, y añaden una pieza más al misterio de la antigua Jerusalén.