Científicos confirman que una tormenta poderosa en Dubai fue más intensa debido al cambio climático.

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Una tormenta de lluvias intensas que causó estragos en la nación desértica de los Emiratos Árabes Unidos la semana pasada, probablemente fue más intensa debido al cambio climático, según ha encontrado un equipo de científicos internacionales.

Los científicos del Grupo de Atribución del Clima Mundial (WWA), compuesto por investigadores de todo el mundo, dijeron que tormentas de lluvias como la que golpeó el pasado lunes se han vuelto un 10 a un 40 por ciento más intensas debido al cambio climático causado por el ser humano.

La tormenta también fue un producto de El Niño, un calentamiento natural y cíclico en el Océano Pacífico que conduce a más lluvias en la región, según los investigadores.

A lo largo de los Emiratos Árabes Unidos y Omán, las inundaciones dañaron edificios y automóviles, y resultaron en cortes de energía eléctrica y cierres de escuelas, según el estudio.

En Dubai, se registraron más de 14 centímetros de lluvia en 24 horas entre el 14 y el 15 de abril, equivalente a un año y medio de lluvia en la ciudad desértica, y la más intensa registrada en los Emiratos Árabes Unidos desde que se tienen registros en 1949. Los investigadores no pudieron establecer una conexión directa con el cambio climático, pero sí determinaron un aumento del 10 al 40 por ciento en la cantidad de lluvia.


El informe descartó la especulación de que la siembra de nubes había desempeñado un papel en las intensas lluvias.

Los investigadores dijeron que, dada la magnitud del sistema de tormentas, la lluvia habría caído de todas formas, independientemente de si se hubieran llevado a cabo operaciones de siembra de nubes - y que una tormenta había sido esperada durante días.

Almazroui dijo que los hallazgos subrayan la necesidad de una mejor adaptación a las fuertes lluvias en la región y de un sistema de alerta eficaz.

Singh dijo que es crítico que las preparaciones para futuras inundaciones se centren en la advertencia temprana para garantizar que las personas no estén en peligro cuando las lluvias extremas golpean la Península Arábiga.